Los habitantes de la zona viven la pesadilla diaria de las fuertes explosiones que provocan incluso ondas sísmicas, con el riesgo consiguiente de hundimiento de sus casas, al tiempo que las nubes de polvo resultantes de las explosiones cubren diariamente la región, sus extensiones forestales y sus prados, poniendo en peligro la salud de la población.
Local inhabitants have to live with the daily nightmare of very powerful explosions which cause seismic shocks which could make their houses collapse, and their health is threatened by clouds of dust from the explosions which settles on the area, the woodlands and the pastures every day.