En el sector de la energía, la UE debería ofrecer tecnología y conocimientos, así como financiación para el desarrollo y centrarse en tres grandes retos: volatilidad de los precios y seguridad energética; cambio climático, incluido el acceso a tecnologías con baja emisión de carbono; y acceso a servicios energéticos seguros, a precios abordables, limpios y sostenibles[8]
In energy, the EU should offer technology and expertise as well as development funding, and should focus on three main challenges: price volatility and energy security; climate change, including access to low carbon technologies; and access to secure, affordable, clean and sustainable energy services[8].